Se conocen 52 huevos imperiales,44 de los cuales se han localizado y los 8 restantes se consideran perdidos o desaparecidos.
La última vez que un huevo salió al mercado, en 2007, se vendió por casi US$14 millones.
Entre los materiales usados por Fabergé figuran el oro, platino, plata, cobre, níquel, paladio y acero, los cuales fueron combinados con el fin de conseguir diferentes colores para la «cáscara» del huevo.
Las piedras preciosas, zafiros, rubíes y esmeraldas de talla cabujón fueron utilizadas para la decoración de los huevos. En cuanto al tipo de talla empleada para los diamantes, era la típica talla rosa. Otras piedras semipreciosas como piedras de luna, granates, olivinos y piedras de Mecca.